
¿POR QUE ES NESESARIA?
La sana convivencia es esencial porque crea un entorno en el que las personas pueden desarrollarse de manera armoniosa y respetuosa. En un espacio donde se practican valores como el respeto, la empatía y la colaboración, se favorece el bienestar emocional y psicológico de los individuos, ya que se sienten aceptados y escuchados. Esto, a su vez, contribuye a la reducción de tensiones y conflictos, creando una atmósfera de confianza y apoyo mutuo que permite a las personas interactuar de forma más eficaz y saludable, ya sea en la familia, en la escuela, en el trabajo o en cualquier otro ámbito social.
Además, la sana convivencia es necesaria para la construcción de una sociedad más justa y equitativa. Cuando se promueve el respeto a la diversidad de pensamientos, creencias y culturas, se favorece la inclusión y se evita la discriminación, lo que fortalece el tejido social y facilita la integración de todas las personas, independientemente de sus diferencias. Este tipo de convivencia también es clave para el desarrollo de habilidades sociales y emocionales, como la resolución pacífica de conflictos, la toma de decisiones colaborativa y el manejo adecuado de las emociones, herramientas fundamentales para vivir en comunidad de manera efectiva y armónica.